Podríamos afirmar que la combinación perfecta para emprender exitosamente es hacer algo que amas hacer y comunicarlo correctamente. La oportunidad que tenemos como emprendedores es que tenemos a nuestro alcance el uso de Social Media como vidriera de lo que hacemos, pensamos y buscamos.
Según informes del Banco Mundial, más del 50% de la población latinoamericana son emprendedores o trabajan en pequeñas empresas y la escasez de innovación es una debilidad para cualquier sector emprendedor. Pues, el desarrollo de herramientas y el uso novedoso de ellas son soluciones que pueden ser eficientes para los negocios, la clave está en su correcto uso. De nada sirve hacer bien un trabajo si nadie sabe de ello.En el último tiempo he estado investigando y analizando cómo distintas personas utilizan Snapchat e Instagram combinando su vida personal con la profesional y ofrecen un espacio de entretenimiento y ventas.
Entonces, podemos ver en estas redes sociales distintas cuentas de profesionales que han construido una marca, generan confianza, comunican sus servicios y productos, proyectan imagen, hacen networking, interactúan con potenciales clientes, venden y generan engagement.
Ejemplos de la relación entre emprendedores y Social Media
Una mujer desarrolla recetas de su Bakery cumpliendo con sus actividades cotidianas de madre, da consejos y muestra ambos lados de sus obligaciones. Su imagen personal es parte central de lo que muestra y desarrolla el protagonismo de su marca con posteos de su hijo, su vida familiar y sus destrezas culinarias.
Una estilista que genera contenido mostrando su talento en todo tipo de detalles, colores y ambientaciones. Los posteos venden desde su mirada profesional para construir espacios modernos, con personalidad y pensados desde el divertimento y la pasión por lo que hace.
Megan & Mike Gilger son un matrimonio que ha creado un espacio virtual en el que ofrecen servicios de arte, tipografías, imágenes, fotografías y diseños con un estilo original. Desde sus espacios digitales muestran lo que son capaces de hacer y tienen una coherencia en su estilo y distintas plataformas digitales.
Tanto éstos como muchos otros emprendedores han encaminado su comunicación a las nuevas aplicaciones como Snapchat y novedades como Instagram Stories. Ellas nos ofrecen un espacio distinto para construir contenido desde la instantaneidad, efímero desde la visibilidad pero importante para mantener la atención de los usuarios, interactuar y entretener.
Cuando la mayor parte de nuestros trabajos y proyectos están conectados al mundo de la comunicación digital es imprescindible poder mostrar que hacemos bien lo que vendemos. En el último tiempo he hecho un proceso de balance en mis redes sociales personales para conectarlas con mis intereses en el mercado, la industria de la comunicación y mi trabajo cotidiano.
Todos los que emprendemos tenemos hoy una gran oportunidad: contamos con muchas herramientas y formatos para invertir tiempo, dinero y pensamiento en contenido valioso, conectado con los servicios que vendemos, mostrando nuestras cualidades como profesionales y nuestras formas de vivir la vida.