El equilibrio de la vida personal y el trabajo es más que un deseo. Es una tendencia y una práctica empresarial que no sólo busca mejorar los ambientes de trabajo sino también que los empleados pueden llevar una vida menos estresante.
“Equilibre actividad con serenidad, la riqueza y la simplicidad, la persistencia con la innovación, la comunidad con la soledad, la familiaridad con la aventura, la constancia con el cambio, liderazgo con subordinación”. Jonathan Lockwood Huie
Las tendencias actuales explican la complejidad de algunas empresas para retener el talento joven y mantenerlos en un ambiente competitivo. De acuerdo al Harvard Business Review, los profesionales buscan un trabajo que signifique algo, resolver problemas de sustentabilidad, interactuar con personas interesantes, encontrar prestigio en su profesión, hacer con pasión, progresar y hallar seguridad económica.
Es por ello que el Work-Life Balance termina teniendo un valor trascendental para elegir un puesto laboral o una compañía que cuide y piense en los profesionales como seres humanos y no máquinas.
La intensidad con la que vivimos nuestras vidas debe ser proporcional a la intensidad con la que gozamos de nuestras profesiones y trabajos. Sin embargo, las presiones sociales y económicas, los vaivenes emocionales y las exigencias del mercado pueden generar un desorden que se ve reflejado en todos los aspectos de nuestra vida. “El éxito no trata de trabajar duro sino de trabajar inteligentemente”, dice Andrew Wilkinson, fundador de MetaLab.
Las compañías más importantes del mundo tienen políticas de trabajo responsable ofreciendo a los empleados oportunidad de lograr Work-Life Balance:
· Actividades extras a las obligaciones cotidianas
· Programas de vida saludable
· Contacto personal con jefes y superiores
· Flexibilidad en tiempos
· Disponibilidad de generar espacios de interacción con la vida personal
· Permisos familiares y personales
La implementación de los programas Work-Life Balance requieren que los líderes de las organizaciones lo tomen como políticas serias convirtiéndose en dirigentes del bienestar y satisfacción de todo un equipo de trabajo.
Los estudios sobre Work-Life Balance afirman que estos programas empresariales aumentan la productividad, propician la fidelidad y humanizan las empresas.
Heather Schuck en el “Working Mom Manifesto” nos dice que “nunca estaremos verdaderamente satisfechos por el trabajo hasta que no estemos satisfechos en la vida”.
Esto me lleva a pensar en la necesidad e importancia del Work-Life Balance como estilo de vida. En cada día laboral, coordino mi profesión con una vida como madre, hija, esposa, amiga y mujer. Mantener el equilibrio es un proceso mental y cotidiano, requiere de relajación, visión clara de objetivos e impronta para darle verdadero valor a lo que nos hace crecer como personas. Cuando trabajamos seguimos siendo nosotros mismos, con nuestras inquietudes y deseos, el éxito reside en cómo balanceamos todo en un mundo en extremo movimiento.